Las cartas desde el Más Allá.- La de Billy Martin para Dave Martínez
Mi querido David: Ya sabes cuánto te quiero y admiro, a lo que se debe te escriba hoy desde éste Más Acá que Uds. llaman Más Allá.
Siempre creí que Washington, la ciudad del equipo que diriges, los Nationals, por ser la capital de la Unión, debía tener un club ganador. Pero nunca ha sido así. Antes los Senadores y ahora Uds. se cuentan entre las organizaciones perdedoras de Grandes Ligas.
Recuerdo cuando en la época de los Senadores se oía retumbar aquello de...: "Washington: ciudad primera en la paz, primera en la guerra y última en la Liga Americana".
Pues, ahora habrá que parodiar eso con "y última en la Liga Nacional".
La verdad es que la trayectoria de esa franquicia no ha sido un fracaso, desde 2005, cuando abandonaron Montreal. Han ganado una serie Mundial, aquella de 2019, cuando despacharon a los Astros en siete juegos; además tienen otras cuatro postemporadas en la historia.
Eso está muy bien, ¿cierto?
Si, amigo David, pero según lo ocurrido después del año de la pandemia, 2020, me permito sospechar que los propietarios de los Nationals se han sumado a esos que sobreviven ganando buen dinero en el beisbol, sin arriesgar lo necesario.
Es decir, pagan el róster con los 80 millones que aporta la televisión a cada equipo y lo demás ingresos quedan de buena utilidad, sin necesidad de entrar en las angustias de contratos importantes. Equipos, David, como los Piratas, los Royals, los Marlins, los Atléticos.
Esos son parásitos.
Comprendo que tú no puedes obligar a esa gente a ser mejores propietarios, pero sí puedes protestar, renunciar, denunciar. Y eso creo deben hacerlo todos los mánager de equipos parásitos, porque es una burla al público, al beisbol, a los demás empresarios, a todos.
Uds. cayeron en 2020, año de la pandemia, a 26-34; en 2021, 65-97 y en la temporada pasada, 55-107. Cuando un equipo pierde más de cien juegos hay que investigar.
Las otras tres franquicias sospechosas en 2022, Atléticos, 60-102; Piratas, 62-100; Royals, 65-97.
Lo que me preocupa no es que un club tenga una mala temporada. Lo que me alarma es que no hagan nada por salir de la desgracia, por ejemplo, vender la franquicia.
Lo cierto, David, es que ya no hace falta vender boletos, souvenirs, comestibles y bebestibles para ganar dinero como propietario de equipo en Grandes Ligas. Mucho más que todo eso paga la televisión y paga el aumento del valor de la franquicia.
Verdad aterrante, pero gran verdad. Los Yankees estaban avaluados en 1973 en 10 millones de dólares. Ahora en siete mil millones. ¡¿Qué tal?!
Mi querido David, mantenme informado.
Te admiro, por lo que te deseo lo mejor.... Billy.