Las cartas desde el Más Allá.- Una más de Clemente para Ronald Acuña
Incorregible Ron: Cuando te mandé la otra carta, a comienzos de tu carrera en Grandes Ligas, suponía que a estas alturas, habrías cambiado para bien. Que estarías corregido. Pero vas de mal en peor.
Como quien dice, "árbol que crece torcido, jamás su tronco endereza".
Por cierto, es la primera vez que alguien envía dos cartas desde este Más Acá, que Uds. llaman Más Allá, para el mismo destinatario.
Es que lo tuyo en el playoff Leones-Tiburones 2023, ha sido lo más lamentable en la historia del beisbol de Venezuela. ¡Y todo disfrazado con los Tiburones!. Un uniforme tan respetable, que han vestido figurones como Luis Aparicio y un ejército de ilustres venezolanos, acompañados de legiones de valiosos, respetables y respetuosos importados. Un uniforme que estabas obligado a respetar.
De paso, el beisbol sabe lo que hace, mi malcríado Ron, porque al irte del róster de los Tiburones, por fin comenzaron a ganarles a los Leones, y por palizas.
Si te tuviera aquí, frente a mí, te preguntaría: A ver Ron, ¿Qué necesidad tenías de ofrecer al público un espectáculo tan negativo, tan preñado de escenas ridículas, de tal grado de mala educación?
Y no tendrías respuesta. No podrías responder, al menos razonablemente, porque no hay explicación para lo que hiciste.
¡Cómo sería la cosa, que muchos fanáticos de los Tiburones opinan ahora que fue un error haberte llevado esa serie!. Y ya no te quieren en el equipo.
Como me imagino sabes, fui pelotero en mi isla de Puerto Rico y en Grandes Ligas, y si alguna vez hubiera hecho tal retahíla de ridiculeces, me habría sepultado después. No hubiera querido ver a nadie, por vergüenza.
¿Tú tienes vergüenza?
Aquí en este Más Acá, me comentan: "Es que ese muchacho no tiene educación casera, hogareña, y eso, ligado con la llegada de 17 millones de dólares por temporada, vuelve demente a cualquiera, incluso a la familia toda, tal y como se sufrió en las tribunas del estadio Universitario".
Deseo que disfrutes al máximo tu dinero, lo merezcas o no, porque "a quien Papá Dios se lo da que San Pedro se lo bendiga". Pero, por favor, no le hagas daño al beisbol, que es lo que te ha enriquecido, lo que sacó de tu pueblo, lo más grande en la historia de tu vida y de tu familia.
Bendice al beisbol, ámalo, respétalo, es lo que merece de tí y de cuantos lo hemos jugado, lo juegan y lo jugarán.
No merece que lo pateés como si fueras futbolista.
Lamentablemente, con todas condiciones que tienes, mis predicciones son que, como sigas tal cual vas, no llegarás nada lejos. Y lo siento. Pero, sinceramente, te deseo mejor suerte de la que te preveo... Roberto.