Otra carta llega desde el más allá la de Jackie Robinson para Jackson Chourio
Coral Gables, Florida (VIP WIRE). Mi admirado Jackson:
Llegas "como anillo al dedo", que era lo aludido por mi abuelo cada vez que alguien hacía algo cuando había que hacerlo.
Tú, maracaibero de nacimiento, has surgido como un interesante candidato a Novato el Año, cuando se clama por una nueva Regla, que impida a japoneses y cubanos cargar con esos honores, después de años de veteranía profesional en la mejor pelota de sus países.
Ser El Novato del Año, no es el asunto, solo aparecer como probable, nos basta a todos.
Ahora, los exagerados, te cargarán como años de veteranía tus aventuras callejeras con las chapitas. Porque dicen que quien batea bien las chapitas (o tapas de botellas de cerveza, estiradas, machacadas), batea con facilidad cualquier lanzamiento.
Tú le has caído a palo a todo el mundo en este máximo nivel... ¡y nada más has cumplido 20 años!
Por supuesto tienes, no un futuro, sino un futurote por delante. De entrada, sin sueldo mínimo, los Cerceveros te firmaron para ocho temporadas, a partir de este año, por 82 millones de dólares, sí hasta 2031. Y el equipo tiene la opción para 2032 y 33.
Es decir en Milwaukee, donde te transformaron de shortstop a centerfielder, para que batearas más cómodo, con menos preocupaciones defensivas, están seguros de lo que eres capaz.
Me imagino cómo de festivo estará el Zulia y las Águilas, ya que eres el más consentido de por allá.
Ahora, como si fuera poco, las informaciones de tu hermano, Jason, indican que también tiene con qué brillar en este mejor beisbol del mundo. Entre tanto, está en clase A de los Indios, con responsabilidades de outfielder también. Ha bateado para 286 de promedio en tres temporadas, y es un jet en las bases ya que ha acumulado 78 robos en 95 intentos.
¡Ah, bueno! y tú en el primer año por estas alturas, 273 de promedio, 20 para-la calle, 72 carreras impulsadas. Más 20 robos en 27 salidas.
Yo disfruté intensamente mi año de novato. Sí, tuve que enfrentar las calamidades de ser el único negro en Grandes Ligas ese año, 1947, pero también hubo mucha gente blanca que me apoyó, especialmente el shortstop de nosotros, los Dodgers, Pee Wee Reese.
Con record de 94-60, ganamos el título de la Nacional, pero los Yankees nos ganaron la Serie Mundial en siete juegos.
Te susurro, para que no se enteren muchos, que mis honorarios por toda la temporada esa, de 1947, fueron cinco mil dólares, más o menos lo que tú cobras por cada lanzamiento que ves en el home. Pero son las épocas. Yo estaba de lo más feliz.
En este Más Acá, que ustedes llaman Más allá, estaré pendiente de tí y de tu hermano
Mi sincero abrazo... Jack.
Gracias a la vida que me ha dado tanto, incluso un lector como tú.
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@juanvene5