Un Congreso opaco

El Congreso de Tamaulipas está cerca de cumplir un año de desencuentros, peleas, dimes y diretes entre las dos principales fuerzas políticas que viven en el estado, lo que ha pasado en los últimos meses es un escenario histórico en la vida política del estado, en un poder en el que este tipo de escenarios no era frecuente.

Uno de los primeros capítulos que se vivieron en el legislativo estatal fue las supuestas investigaciones que se iban a realizar por parte del recién llegado presidente de la Junta de Coordinación Política, el diputado morenista Armando Zertuche, lo cual ocurrió en el mes de diciembre del año 2021, en la antesala de lo que seria la batalla política a la gubernatura.

Sin embargo, fue poca la información o las carpetas que se dieron a conocer en este caso, los culpables, los desvíos y las  empresas siguen siendo un tema obscuro en la opinión pública estatal.

El segundo capítulo de los enfrentamientos y batallas, se vivió en el mes de marzo del año 2022, cuando Armando Zertuche y la bancada de Morena perdió la Junta de Coordinación Política, luego de que dos diputadas de su bancada se brincaran al PAN y apoyaran esta acción.

De aquí en adelante, se han vivido escenarios de enfrentamientos, de dimes y diretes entre las bancadas, uno de estos fue la aprobación de diversas leyes o decretos, como la Superfiscalia en el mes de julio del año pasado, luego de ser finalizado el proceso electoral donde fue elegido Américo Villarreal para la gubernatura.

Durante el periodo de de entrega-recepción fueron varios los momentos en el que las disputas, los dimes y diretes fueron parte del actual de los diputados locales, de ambas bancadas.

Sin embargo fue este viernes 13 de enero cuando la Junta de Coordinación Política regreso a las manos de Morena, esto luego de obtener el apoyo de dos diputadas panistas, lo cual provocó que fueron expulsadas de su partido.

Los dimes y diretes una ves más salieron a relucir entre los legisladores tamaulipecos, esta vez, eran los del PAN los que exigían y reclamaban lo que los morenistas vivieron en el mes de marzo del año pasado, ¿Cómo da vueltas la vida no?

Ante este escenario que acabo de relatar, hay un punto importante que no se ha tomado, el cual es la transparencia, que en la 65 legislatura ha dejado mucho que desear, por que la información que debería de estar disponible en la Plataforma Nacional de Transparencia como lo es, las contrataciones de obras y servicios, el nombre de los proveedores, la lista del personal contratados, los informes financieros actualmente están sin datos o incompletos.

Es curioso que pase esta situación por que el Congreso de Tamaulipas ejerció en el año 2022, 205 millones 860 mil pesos, para el año en curso el presupuesto es un poco mayor.

Ademas de la falta de transparencia, también durante el último año no se han hecho avances en la administración, uso de recurso o la vigilancia que se debe de tener en los recursos o las acciones de cada diputado.

Basta decir que Congreso como el de San Luis Potosí o Nuevo León tiene a la mano de forma accesible las declaraciones patrimoniales de cada uno de los diputados y personal que ahí labora, lo cual en la tierra que nos vió nacer es algo totalmente opaco.

Seria importante poner más atención en el funcionamiento de este poder, por que los mas de 200 millones de pesos que se ejercen bien los vale.

BUEN INICIO DE AÑO.

Durante esta semana, el gobernador realizó un recorrido por la Ciudad de México con funcionarios del gobierno federal como; Carlos Martinez del Infonavit, Manuel Barttlet de la CFE, Francisco Garduño Yañez del Instituto Nacional de Migración o el secretario de Marina, el almirante Jose Rafael Ojeda Durán.

Las dependencias en las que hubo reunión son parte de los temas prioritarios para tamaulipas, y que son de todos conocidos, esto es una buena señal en el recién inicio de año, lo cual se suma a la llegada de recursos federales y la recuperación de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Tamaulipas.

Estas acciones, y las que muy seguramente vendrán, son una buena señal para el año que recién inicia, sólo basta observar y analizar cómo el gobierno empieza a desarrollar su trabajo.