Editoriales

Sí existen los contrapesos y debemos fortalecerlos

  • Por: JESÚS ZAMBRANO GRIJALVA
  • 08 MAYO 2020
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Sí existen los contrapesos y debemos fortalecerlos

"Al PRD, por sus 31 años"

Los demócratas debemos festejar que hace apenas una semana la oposición política mexicana detuvo un golpe de Estado "blando" o "técnico" impulsado desde la Presidencia de la República para anular al Congreso, al Poder Legislativo.

López Obrador quería un periodo extraordinario de sesiones de las cámaras en medio de la pandemia para que se aprobara una reforma que le diera facultades plenas para modificar y manejar libremente y a su antojo, el Presupuesto de la Nación.

Los grupos parlamentarios del PAN, PRI, PRD y MC en el Senado y la Cámara de Diputados cerraron filas y dijeron "no" a esa pretensión porque significaba la desaparición de facto del Poder Legislativo y por lo tanto es anticonstitucional.

Recuérdese que la división de poderes y los congresos surgieron precisamente para controlar el ejercicio del poder gubernamental, para evitar sus excesos y exigir la rendición de cuentas en el manejo de los dineros.

Esos preceptos han quedado plasmados en las constituciones de los países democráticos. En México ha sido labrado con cincel en nuestras distintas cartas magnas desde nuestra independencia y, subrayadamente, desde 1857.

La decisión de evitar que el Ejecutivo concentrase mayores poderes poniendo como pretexto la pandemia, fue magnífica. Qué bueno que las oposiciones en su pluralidad cerraron filas y que la sociedad civil —académicos, especialistas, articulistas y organizaciones diversas— hayan hecho escuchar su voz exigiendo a las bancadas del "bloque de contención" que no fueran a ceder.

Después de casi dos años de aquel 1 de julio del 2018 aparece así una acción organizada o una unidad en la acción de partidos y sociedad no partidista. Y es algo digno de destacar puesto que, desde el 2 de julio de ese año, ha sido frecuente el reclamo de la gente preocupada por lo que empezaba a pasar en México debido a las decisiones insensatas de AMLO:

"¿Dónde está la oposición?", se preguntaban, y simplemente se respondían: "No existe, quedó barrida". La oposición a la que aludían eran los partidos no gobiernistas.

Las razones del tsunami electoral lopezobradorista han sido muy analizadas. Cada partido ha hecho su autocrítica por los errores cometidos. Quiero pensar que organizaciones de la sociedad civil, destacadamente los analistas, científicos, académicos, trabajadores del arte y la cultura, han hecho lo propio, ya que una gran proporción de ellos promovió la campaña de López Obrador, creyó en y votó por él.

Así transcurrió ese pasaje de la historia, pero no nos consumamos en el autofustigamiento.

No se trata del "borrón y cuenta nueva", sino de comprender que hoy son momentos de asumir que debemos caminar juntos, de cerrar filas y actuar unidos para frenar el deterioro democrático y la degradación de la vida nacional que, con determinación se impulsa desde el poder.

Muchos signos alentadores indican que se ha entendido la necesidad de construir un bloque alternativo para —en lo inmediato— exigir un programa de emergencia ante la contingencia sanitaria, la crisis económica y la protección del ingreso de millones de trabajadores y sus familias.

Múltiples colectivos empresariales, políticos, académicos y sociales están coincidiendo. Hay que seguir insistiendo, aunque hoy el autócrata se niegue, porque piensa falazmente que el apoyo social que obtuvo en las urnas le otorga poderes absolutos.

Más allá de estas necesarias acciones inmediatas está la ineludible preservación de la república democrática y el respeto al Estado de Derecho que deben ser defendidos por la nación entera, constituida por todas las instituciones del Estado mexicano y todos quienes integramos este gran país. Eso es lo que está en juego.

Por eso subrayo: ¡Que vivan los contrapesos institucionales, políticos y sociales! ¡Hay que fortalecerlos por el bien de México! Nunca "el país de un solo hombre" le ha hecho bien a México. No repitamos páginas negras de la historia.

(*) (Exdiputado federal/El Universal)

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