Amenaza mal clima a la producción del café de calidad

CIUDAD DE MÉXICO.-El aumento de temperaturas, cambios en la temporalidad de lluvias y la ocurrencia de fenómenos meteorológicos más extremos representan una serie de retos para la producción de productos agropecuarios, incluido el café, cuyo consumo oscila en las 2 mil millones de tazas diarias en el mundo.

Bajo ese escenario, Pablo González Cid, fundador y CEO de Café Punta del Cielo, alertó que lo relevante actualmente en la industria no es aumentar la producción, sino mejorar las condiciones del suelo y del ambiente donde se siembra.

"La escasez no es algo que nos deba preocupar. El reto va a ser mayor en encontrar un café con las condiciones de calidad, aroma y sabor y que sea totalmente sustentable", expuso el directivo durante su participación en una serie de foros organizados por Iniciativa Climática México (ICM).

Cid señaló que si bien México se encontraba entre los principales cinco productores globales de café en la década de los 90, actualmente ocupa el duodécimo lugar debido a efectos del cambio climático y a la menor calidad que de la siembra, y por ende un menor precio de venta.

"Lo que nos está afectando muy fuerte es que no sólo estamos produciendo menos, sino que estamos produciendo calidades distintas a lo ideal, lo cual tiene menos margen para los productores para poder seguir siendo sustentable", explicó el empresario.

Y es que el café, a diferencia de otros cultivos, es los que a mayor cantidad más rentabilidad para los productores de una cosecha de grano a mayor altura, menos sol y más frío da oportunidad, permite una mayor ganancia a una producción abundante a mediana o baja altura.

"Para que puedas producir un buen café de calidad es indispensable que no le dé más de 10 horas de sol al día", detalló el directivo de Café Punta del Cielo.

De acuerdo con estimaciones del ICM, hacia 2025, las regiones aptas para el cultivo de café podrían reducirse hasta en un 50 por ciento.

• Por ello, el representante cafetero señaló que el pago de unos pesos más por una taza de café puede incidir considerablemente en un mayor cuidados de la biodiversidad y preservación de los suelos donde se siembra el café, esto último lo más importante, ya que por sus condiciones, una siembra sin precaución puede causar la infertilidad de la tierra.