¡Feliz Navidá!

Ya me voy, a pasar en familia la fiesta más grande del año, con el aniversario de la natividad del Dios vivo hecho hombre.

Por eso, los próximos días dejaremos de vernos por este espacio.

Mientras vuelvo y si me siguen concediendo el favor de su lectura, aquí les dejaré algunos dichos, por aquello que no vaya a haber señales, o habiéndolas, no nos alcance para desglosarlas.

La confirmación, desde su Mañanera de ayer en cadena nacional, de que en febrero regresa para cumplir con la invitación al informe de gobierno del doctor AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, de parte del Presidente de la República, ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, cierra una jornada de éxitos políticos y personales para el Mandatario tamaulipeco, que inició con el año y algunos ubican, en el momento mismo del relevo sexenal doméstico.

Todavía ayer, el galeno gobernador -acompañado de la doctora MARÍA, su esposa- andaba entregando tarjetas del programa federal, complementado con recursos del Estado, para la cobertura universal de apoyos a las personas con discapacidad y supervisando las obras de remodelación que finalmente se están haciendo al Palacio de Gobierno estatal, ausente de las consideraciones necesarias por largos años y sexenios.

En las vísperas de las navidades, no puede sino acompañar la dicha y el entusiasmo a la familia gobernante del Estado, decía, con la satisfacción del deber cumplido -aquel fue otro de los compromisos de campaña solventado- y los parabienes materializados desde las cúpulas.

La visita Presidencial de la semana pasada, confirmada en el mensaje de ayer -"Américo está haciendo su trabajo muy bien y está inaugurando una etapa nueva en Tamaulipas de gobiernos responsables, íntegros y honestos"-, más las deferencias, el día de la víspera, al paso de la gira de la candidata presidencial CLAUDIA SHEINBAUM, coronan ese rosario de éxitos venturosos.

Todo ello no es producto de la casualidad; deviene de la voluntad y el trabajo, la capacidad y el esfuerzo; la formación, las convicciones, las relaciones personales, traducidas todas en los resultados materializados en favor de los tamaulipecos.

La presencia y el mensaje de la abanderada presidencial morenista, confirmó que a Tamaulipas, con el doctor VILLARREAL ANAYA, le depara un futuro más promisorio, multiplicando los apoyos y consideraciones que ahora se tienen del Presidente AMLO.

En el pasado, las más de las veces, los tamaulipecos y tamaulipecas debimos afrontar las consecuencias de las erráticas definiciones políticas de los actores del momento, fletándose con proyectos nacionales perdedores.

AMÉRICO estuvo con AMLO y ahora comparte su liderazgo político, alineado con los postulados de la constructora del segundo piso de la cuarta transformación, enfilada, sin competencia, a ganar la elección del próximo 2 de junio y a quien desde mucho antes de asumir, le brindó sus respetos, hasta consolidar una amistad y alianza sólidas.

CLAUDIA lo dijo y lo dejó sentir aquí: cuando gane la presidencia de la República, dará todo su respaldo al doctor, garantizando que a Tamaulipas no le ocurrirá lo que en anteriores administraciones, cuando fue olvidada por los gobiernos de la corrupción.

En tales escenarios, insisto, los bonos de AMÉRICO cierran por todo lo alto el año y se presentan ascendentes para lo que sigue; en ello va intrínseco, el bienestar de los tamaulipecos y el crecimiento del Estado.

Otro que celebra logros y prospectiva, es el Presidente del Poder Judicial del Estado, DAVID CERDA, quien al tenor de una fiesta navideña ofrecida a periodistas del Estado, en Victoria capital, ponderó las inercias generadas con los otros dos poderes -Ejecutivo y Legislativo-, que han ido en beneficio del ejercicio de la judicatura y los justiciables.

Nuevos juzgados y políticas públicas aplicadas para abatir el rezago y responder a cabalidad con las responsabilidades, en el año que le queda de gestión al frente del Supremo Tribunal de Justicia y el Consejo de la Judicatura, fue el planteamiento compartido con sus convidados.

Que así sea.