Exportaban vehículos robados hacia México
Dos hombres fueron puestos bajo custodia por cargos relacionados con la exportación de vehículos robados, anunció el fiscal federal Nicholas J. Ganjei
Está previsto que Noa Águila comparezca por primera vez ante el juez J. Scott Hacker, en McAllen.
Dos hombres fueron puestos bajo custodia por cargos relacionados con la exportación de vehículos robados, anunció el fiscal federal Nicholas J. Ganjei.
Sadiel Noa Águila, de 42 años, y Miguel Báez Echevarría, de 36, residían en Pharr y Las Vegas, Nevada, respectivamente. Ambos son cubanos, indicó el Departamento de Justicia.
Está previsto que Noa Águila comparezca por primera vez ante el juez J. Scott Hacker, en McAllen, mientras que se espera que Báez comparezca ante la jueza Brenda Wexler, en Las Vegas.
Según la denuncia penal, las autoridades iniciaron una investigación en 2024 que descubrió una gran red vinculada a numerosos robos de vehículos en todo el país. Los cargos alegan que los autos fueron robados principalmente en los principales aeropuertos metropolitanos y sus alrededores, incluyendo Las Vegas, Phoenix, Arizona; Salt Lake City, Utah; Denver, Colorado; Fort Lauderdale, Florida y ciudades de Texas, incluyendo Dallas-Fort Worth y Houston.
Como parte del plan, los conspiradores supuestamente utilizaban dispositivos electrónicos para robar los vehículos y reprogramar las llaves electrónicas. A continuación, equipaban los vehículos con matrículas fraudulentas o alteraban los números de identificación de los vehículos antes de revenderlos, según los cargos. Al parecer, también exportaron varios vehículos a México a través de los puertos de entrada del condado de Hidalgo y El Paso.
Noa Águila supuestamente intentó exportar uno de los vehículos, un GMC Sierra AT4 de 2022 a través de un puerto de entrada en el condado Hidalgo el 1 de octubre de 2024. Se había denunciado su robo en Denver el mes anterior, según las acusaciones.
Los cargos alegan que Báez está vinculado al robo de al menos 15 vehículos adicionales y estiman que la organización robó millones de dólares en autos.
Ambos están acusados de complicidad en la exportación de vehículos robados, que conlleva una pena máxima de 10 años de prisión, en caso de ser hallados culpables. Báez también se enfrenta a cargos de conspiración para cometer blanqueo de capitales, por los que podría recibir hasta 20 años de prisión federal.