Obtienen presas de Tamaulipas captación récord
Almacenaje de agua en Tamaulipas registra los mejores niveles en los últimos cinco años
La presa "Vicente Guerrero" pasó del 9 al 59 por ciento de captación en un año.
Por primera vez en, al menos, cinco años, las principales presas del estado han alcanzado niveles de almacenamiento altos, en algunos casos por encima del 90 por ciento, gracias a las lluvias intensas que dejó la tormenta tropical "Alberto" a su paso por el noreste del país.
Los datos oficiales del Monitoreo de Presas muestran que, de los 11 diques en Tamaulipas que observa la Comisión Nacional del Agua (Conagua), al menos siete registran en 2025 niveles de llenado considerablemente superiores a los observados en los últimos ciclos, donde algunos de ellos se encontraban en condiciones críticas hace apenas un año.
Entre los casos más destacados está la presa "Pedro J. Méndez", que este año alcanzó el 101 por ciento de su capacidad, frente al 18 por ciento que tenía en 2024 y el mismo porcentaje registrado en 2023.
Algo similar ocurrió con la "Emilio Portes Gil", que pasó de un 22 a un 90 por ciento, y la "República Española", que brincó de 16 al 97 por ciento.
Otras presas importantes, como "Marte R. Gómez" subieron del 49 al 93 por ciento, y el Sistema Lagunario mejoró notablemente, al pasar del 29 por ciento en 2024, a un actual 92 por ciento.
El caso de la presa "Vicente Guerrero", una de las más relevantes para el abastecimiento del centro y sur del estado, también refleja una recuperación notable, al pasar del 9 al 59 por ciento, la cual es una de las más grandes del país y que abastece de agua a un gran número de municipios del centro de Tamaulipas.
El factor determinante detrás de esta mejora ha sido la tormenta tropical "Alberto", que tocó tierra en junio del año pasado, causó el desbordamiento de los ríos y obligó a decenas de familia a huir de sus domicilios por las inundaciones.
Aunque su paso fue breve, sus bandas nubosas provocaron precipitaciones intensas y generalizadas en gran parte de Tamaulipas, particularmente en las cuencas que alimentan a las presas del centro y sur.
Según estimaciones del Servicio Meteorológico Nacional (SMN), algunas regiones del estado acumularon en cuestión de días el equivalente al 40 o 50 por ciento de su precipitación anual habitual, lo que permitió una recuperación rápida y visible en el volumen de agua almacenado.
Sin embargo, esta mejora no debe interpretarse como el fin de la sequía, ya que Tamaulipas acumula, al menos, nueve años consecutivos con precipitaciones por debajo de la media histórica, periodo en el que, también, ha incrementado la demanda de agua por el crecimiento económico, industrial y demográfico.
El déficit hídrico ha afectado no sólo al campo, sino también al suministro urbano e industrial, como sucedió en el 2024, cuando se suspendió el suministro para diversas actividades comerciales para darle prioridad al consumo humano.
Además, la presa "Falcón", ubicada en la región fronteriza, continúa en niveles alarmantes: apenas un 8 por ciento de su capacidad total, lo que representa, incluso, una baja respecto al 36 por ciento reportado en 2024.
La escasez en esta presa tiene impacto directo en municipios del norte tamaulipeco y en el abastecimiento compartido con Estados Unidos, bajo el Tratado de Aguas de 1944, país al que se le adeudan millones de metros cúbicos de agua, el cual debe liquidarse a más tardar octubre de este año.