Reumatólogo pasará 10 años en prisión: Millonario fraude de médico al Medicare
Diagnostica erróneamente a cientos de pacientes con el propósito de cobrar más dinero a los seguros para su beneficio propio
Durante el transcurso del juicio, la fiscalía argumentó que Zamora Quezada tenía un promedio de 1,300 pacientes al año.
El Dr. Jorge Zamora Quezada, quien en 2020 resultó culpable por cargos de fraude médico, de conspiración para cometer fraude médico y para obstruir la justicia, fue condenado en el Tribunal Federal en McAllen a diez años de prisión y tres en libertad supervisada, una vez cumpla su sentencia.
Durante la audiencia, el juez indicó que el médico "Estaba intoxicado por el dinero mientras intoxicaba a sus pacientes".
Además, como parte de la condena, Zamora Quezada, quien es reumatólogo, deberá pagar 28 millones. Poco más de 20 millones de dólares deben ser restituidos a Medicare mientras que a Medicaid deberá pagarles 6.4 millones de dólares. A Tricare el pago deberá ser de 615 mil dólares y a BCBS de 905 mil dólares.
Todo ese dinero deberá pagarlo cuando sea puesto en libertad.
Zamora Quezada, quien acordó no apelar su sentencia, fue hallado culpable en 2020 luego de varias semanas de testimonios y presentación de evidencia. Con ese veredicto el jurado determinó que el reumatólogo diagnosticó erróneamente a cientos de pacientes con el propósito de cobrar más dinero a los seguros médicos para beneficio propio por más de una década.
Durante el transcurso del juicio, la fiscalía argumentó que Zamora Quezada tenía un promedio de 1,300 pacientes al año diagnosticados con artritis reumatoide y que cobró a los seguros médicos hasta $325 millones de dólares.
Mientras, otros médicos de su misma especialidad diagnosticaron un promedio de 400 pacientes con la misma condición.
Falsifica firmas médicas
En otro caso, un hombre de 64 años ha sido declarado culpable de todos los cargos acusados de liderar un plan de fraude al Medicare, que implicaba la presentación de registros médicos falsificados, anunció el fiscal federal Nicholas J. Ganjei.
El jurado deliberó durante menos de dos horas antes de condenar a Paul Njoku tras un juicio de tres días.
Njoku era propietario y director ejecutivo de una agencia de atención médica domiciliaria llamada Opnet Health Care Services Inc., que operaba como P & P Health Care Services.
El jurado escuchó el testimonio de testigos que afirmaron que Njoku, u otros bajo su supervisión, falsificaron firmas de médicos y enfermeras. En concreto, Njoku y otros recortaron firmas antiguas y las pegaron en órdenes médicas, notas y evaluaciones de enfermería recién creadas. Medicare exigía a las agencias de atención médica a domicilio que conservaran estos documentos para obtener el pago por la prestación de servicios de atención médica a domicilio.