El asesino silencioso
Un adicto, soberbio y negado
El fumador, es un adicto compulsivo, enfermo de sus emociones, ferviente dependiente con un nivel de ansiedad alto, que no acepta el daño tan grande que le está generando esta droga, ni el daño que les está causando a los fumadores de segunda mano que viven a su alrededor, las características de un adicto, son todas del fumador o la fumadora, primero, se distingue por su sobrada soberbia.- Si me he de morir, tengo que saber de qué moriré.- No sabe lo que es estar sentenciado a muerte en una cama de hospital con respiración artificial.- Es inmaduro, porque no asume su responsabilidad respecto a la falta de respeto de los que no fuman, también, es endeble, no tiene carácter para decir.- No gracias.- Tiene un enorme vacío espiritual, su autoestima baja, está lleno de miedos, el cigarro le da seguridad, estatus, facilidad de palabra, es un magnífico complemento para socializar, pero se olvida de sí mismo, sin duda, es un ser bipolar, inestable, irritable, neurótico, explosivo, más cuando se queda sin cigarros, todo hace suponer que el mundo se va acabar, el cielo se viene encima, no es más que un ser mediocre que no puede contra su adicción, es un inútil, que no podrá con nada en su vida.