Increíble: Río Bravo ya está mejor que Reynosa

Dicen que nunca ha sido bueno hacer comparaciones, nomás que en asuntos de desarrollo urbano son hasta necesarias para darnos una idea del nivel de gobernantes que tenemos, ya sean municipales, como estatales y federales.

Pero me abocaré a las comparaciones entre los municipios, lo digo porque en la semana anterior, MIGUEL ÁNGEL ALMARAZ MALDONADO, el alcalde de Río Bravo, dio una especie de miniinforme de sus poco más de cinco meses al frente de aquella ciudad, golpeada inmisericorde, por los presidentes municipales que ha padecido.

El caso es que Almaraz asegura que en ese breve periodo, de poco más de cinco meses, se han pavimentado 42 calles. Tuvo la sinceridad de decir cuántas cuadras fueron, según sus datos, 215, información precisa al respecto que las autoridades locales de nuestra madreada Reynosa nunca la han proporcionado.

Regularmente salen con número de metros cuadrados pavimentados, sabedores de que nadie se va a tomar la molestia de hacer la conversión a metros lineales.

Y como eso de los metros cuadrados ya no pega entre la gente, ahora salen con número de calles, sin precisar cuántas cuadras de esas calles son las que se pavimentaron.

Y es que, oiga usted, pavimentar cinco o seis cuadras por aquí y por allá no resuelve ni un problema. Lo bueno es que el alcalde riobravense le puso el cascabel al gato informando el número de cuadras pavimentadas. Por lo mismo, la autoridad local deberá hacer otro tanto.

El mal humor social anda sobre los 35 grados centígrados, o séase, que en cualquier momento puede llegar a los 40, una temperatura que no va a descender entregando colchones, hornillas y de pilón croquetas, como subliminal mensaje para los ciudadanos que lo critican por las colonias o que acuden a la plaza principal a protestar y otros a registrarse para pedirle al Congreso del Estado rescate a Reynosa de los pulpos chupeteros que desde el año 2016 han estado succionando el presupuesto municipal.

Por cierto, como ya lo comenté en mi columna de ayer, el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA vino a Reynosa y Río Bravo para constatar la entrega de apoyos, tanto del Gobierno federal como estatal para los damnificados por la pasada tormenta, evento al que no fue invitado el alcalde CARLOS VÍCTOR PEÑA ORTIZ, por ser considerado por la ciudadanía como persona "non grata".

Lógico que no pasó desapercibida la falta de confianza en la autoridad que representa el mentado Makito, que al verse ninguneado le dio por andar entregando por su cuenta colchones, hornillas, bolsas de Doritos, botellitas de agua, Coca Colas y croquetas, con la lógica intención de congraciarse con quien nunca ha sentido nada por ellos, siendo esa la principal causa de lo atrasado que está Reynosa.

El Makito, es público y notorio, no radica en esta ciudad desde hace por lo menos 15 años; tampoco tiene familiares ni por consanguineidad o afinidad que padezcan las deficiencias de Reynosa, ni tampoco amigos que vivan por aquí para que, en un momento dado, le dijeran: "Oye, no la friegues, dale una manita de gato a la ciudad"; pero, bueno, eso es lo que sacó el MORENA por andar postulando gente así para la presidencia municipal.

Algunos dirán: que deje las cosas en paz y a esperar a octubre de 2027, si es que antes la Auditoría Superior del Estado no lo termina llamando a cuentas ante el Congreso del Estado de Tamaulipas.

Pero para el ciudadano que vive por las colonias de las orillas y ya en las del sector centro, la espera es larga y por supuesto se irrita al saber que Río Bravo ya está mejor que nosotros.

Amigos del columnista por la vecina ciudad me aseguran que hasta los baches ya fueron tapados, y ni modo de comparar el presupuesto riobravense con el de Reynosa, que no obstante ya está en tres mil millones de pesos anuales, seguimos igual de jodidos que en el 2016, y en rubros como agua, drenaje y seguridad, rayando a nivel de la selva.

Lo digo porque el INEGI dio a conocer su evaluación sobre la percepción de inseguridad en el año 2024 y entre las diez en donde la gente se siente segura de vivir en Tamaulipas sólo se encuentra Tampico, con un 29.7 por ciento, o séase, que de cada diez tampiqueños tres no sienten vivir en medio de inseguridad.

El dato viene a respaldar que hoy por hoy el puerto jaibo es la ciudad de mayor atractivo turístico, comercial e industrial por toda Tamaulipas altiva y heroica.

Por su parte, Nuevo León cuenta con dos municipios dentro del top ten: San Pedro Garza García, que dicho sea de paso, es el número uno en todo el país, con 2.4 por ciento; o séase, que de cada diez sampetrinos sólo uno se siente inseguro. Me imagino quiénes, los supermillonarios que, por lo mismo, se transportan en helicóptero de su casa a los centros de negocios y viceversa.

El otro municipio seguro es San Nicolás de los Garza, en donde de cada diez, aproximadamente tres no se sienten seguros. También supongo que son los millonarios del lugar. Y en Coahuila, Piedras Negras, con 20.5 por ciento y Saltillo, con 24.5. Lo que pone de manifiesto que los gobiernos de por allá están haciendo su chamba. Nuevo Laredo y Reynosa no pintan, eso se daba por descontado, así sucedería, porque en ambas ciudades es público y notorio que en las calles manda la delincuencia, incluso hasta en presencia de los supuestos agentes de la ley.

Lógico que, el que Reynosa sea inseguro, al Makito le importa una pura y dos con sal, por ser un desarraigado hasta la médula, pero a CARMENLILIA CANTUROSAS sí le habrá calado que la ciudad que gobierna no esté en el top ten de las de mayor seguridad y que, por lo mismo, sus habitantes, en su inmensa mayoría, no se sienten seguros.

Le habrá de confortar que Tampico es la única ciudad tamaulipeca en el top ten que es gobernada por MÓNICA VILLARREAL ANAYA, hermana del gobernador.

Y se me estaba pasando comentar que el cabildo reynosense tiene otro broncononón, y es que las regidores panistas, JUANA SÁNCHEZ, SOFÍA GARCÍA GÓMEZ (hija del exgobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA) y el también regidor albiazul, JOAQUIN RAMÍREZ, están solicitando mediante oficio y toda la cosa el retorno de la regidora HIDILBERTA VELÁZQUEZ MENDOZA, la cual prácticamente fue obligada a dejarle el cargo a la directora musical del mariachi "Los Chayoteros" KARLA LUNA GONZÁLEZ, pero como esta mujer tiene ya casi cinco meses que no se para por el palacio municipal, por ley debe ser separada del cargo. ¡Bolas don Cuco!

Y por hoy, BASTA.

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