No hay peor ciego que el que no quiere ver
Aún me acuerdo de aquellos paseos por la presa Marte R. Gómez o en la Falcon; todavía sigue en mi mente el aroma del pescado fresco, las ruinas del Guerrero viejo apenas se alcanzaran a ver. Me acuerdo que nos deteníamos en Los Guerra a hacer las últimas compras; hoy ya no queda nada de esos pueblos.
Y si bien es cierto que no hay peor ciego que el que no quiere ver cómo ha escaldo la violencia, hoy cientos de familias son víctimas del desplazamiento forzado ante la crecida de la violencia en varias zonas de la entidad, de lo último sabido fue el caso de residentes de Palo Blanco, Santa Ana y varias colonias fueron alertadas ante una posible crecida de hostilidades entre los grupos que disputan el control de las plazas.
Pero regresemos a la frontera chica, donde las escenas de vehículos incendiados, calles vacías y la presencia de convoyes de vehículos blindados, algunos de ellos con el blindaje artesanal, se pueden observar a cualquier hora del día; hombres fuertemente armados custodiando algunos sitios, como si fuera una película de ciencia ficción, ¡sí!, así fue descrita por uno de sus pobladores una calle del poblado Los Guerra.
No ahondaré en detalles, pero sólo basta recordar que desde 2010 hasta la fecha esta zona se ha caracterizado por los hechos de violencia; todavía recuerdo los cintos de camionetas incendiándose tras la fractura del brazo armado, Los Zetas y el Cartel del Golfo, así es como se vuelve a ver ahora.
Y es que también es la brecha 109 en Río Bravo donde si despiertas temprano y, pues salir de algún sitio cercano, podrás ver camionetas aún incendiándose, como hace algunos días un cibernauta compartió un video de esta zona.
Sobre algunas carreteras y brechas se pueden ver circulando los vehículos tipo "monstruo", las caravanas de camionetas, así como dice la canción "Cortas y largas se ven caravanas, paseando por las brechas de Tamaulipas, minitostones también tumba aviones, con piñas para la explosión", así la triste realidad, inclusive, algunos
medios internacionales ya comparándonos con Croacia o Afganistán.
Ojalá sea en los próximos días que ya volvamos a estar, aunque sea, en los primeros diez estados más seguros, ya que luego de estar en la posición 6 ahora estamos por debajo del lugar 25. Ojalá rápido vuelva la paz y la tranquilidad, aunque para eso hay que trabajar en la seguridad.