Reelección contra democracia
La reelección que se anunció con la intención de institucionalizarse en los cargos de elección popular, con excepción de la presidencia de México y las gubernaturas, siempre me pareció que iba a resultar perjudicial para la democracia, sobre todo en los cargos que conciernen a las alcaldías convertidas desde tiempos inmemoriales en las manzanas de las discordias, no porque se anden aporreando guiados por el afán de servir, sino porque en las alcaldías hay jugosos presupuestos y con una opacidad que con todo y el INAI, no rinden cuentas lo que se dice bien a bien de qué pitos y modos se ganan el presupuesto.
Pero finalmente se aprobó y en las elecciones municipales de 2018 hubo alcaldes por todo el país que se reeligieron y a la mala, como aconteció aquí en Reynosa, un proceso electoral en el que con todo y la multa a MAKI ESTHER ORTÍZ DOMÍNGUEZ, por haber utilizado recursos públicos, aún así prolongó su periodo conocido como El Makiato, y que pasó a ser de infausta memoria, como también pinta para lo mismo su tesoro, el príncipe CARLOS PEÑA ORTIZ.
Pero no obstante los malos ejemplos que lo mismo hubo en Tamaulipas que en Nuevo León, Coahuila, Querétaro y la CDMX entre otros, ninguno de nuestros diputados ha subido a la Tribuna para pedir se derogue la reelección, que en los hechos se ha visto ha sido utilizada para perpetuarse en el carro de una forma que ya Reynosa parece la versión de San Garabato de las Tunas, Cuc, el mítico pueblo de la historieta de los Súper Machos, en donde don PERPETUO DEL ROSAL hacía y deshacía ante la complacencia de los fifiruchillos del pueblo.
Así estamos en nuestra mal querida Reynosa, con una señora que ya tomó por su cuenta a la ciudad y que ahora proyecta que el príncipe Carlos se reelija con todo y tener un impedimento constitucional. El muchacho alegre de Mission y egresado de Harvard, todavía está péndulo en el Juzgado Penal de San Fernando, que además en el Tribunal de marras dictaron un acuerdo en el que lo suspendieron en sus derechos políticos por ser un prófugo de la Ley, aunque esto último es un decir porque viene a Reynosa dos y a veces hasta tres veces por semana y los de la policía investigadora han de andar ciegos o andan muy ocupados en otras cosas, porque nomás no se dan cuenta cada vez que acude por el palacio municipal.
Ahí está fallando y de a feo el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, porque está consecuentando esa anómala situación. Pero no solamente él, sino también los diputados locales y no se diga de los síndicos y regidores, y el fiscal general de Tamaulipas, IRVING BARRIOS MOJICA, de coleada, que si bien en teoría tiene la facultad de echarle el guante a Carlitos en acatamiento a la orden de aprehensión que le giró el juez penal de San Fernando, si sus policías no lo hacen, lógicamente es por instrucción. El amparo con el que el príncipe Carlos anduvo picando los ojos a la ciudadanía por ser presidente del Consejo de la COMAPA y que según la Ley eso le da fuero, ese recurso ya lo quemó. Se sabe que lo promovió en Monterrey en un juzgado federal.
También trascendió que no cumplió en los términos pactados, ya se imaginarán mis lectores qué tipo de términos y y por lo mismo el juez de Monterrey salió con que no era de su competencia y remitió el asunto a un juzgado de Reynosa, que cayó al tristemente famoso Octavo de Distrito, nomás que como ahí ya le habían negado el amparo y por los mismos hechos, le dieron tronco a la intentona de CARLOS VÍCTOR PEÑA ORTÍZ, de sorprender a las autoridades judiciales. Y como el caso de él en cuanto a intentar reelección no será aislada, si no se va a reformar la Constitución para derogar la reelección en encargos alcaldicios, el IETAM tendrá que vigilar milímetro a milimétro las acciones campañiles de Peña Ortíz, en el supuesto de que el MORENA lo postule para la reelección.
También, si en la "suerte" favorece a MAKI ORTÍZ, la que bien sabe que la reelección alcaldicia de su tesoro se está complicando y por lo mismo como plan "B" ya proyecta su extraño retorno a la presidencia municipal, porque para la senaduría también está viendo que conforme se acerca el proceso electoral 2023–2024, esos planes se complican. Nomás que a terca no hay quien le gane y nada sorpresivo sería que buscara la postulación por el Movimiento Ciudadano, aprovechando que JUAN CARLOS ZERTUCHE ROMERO, el dirigente estatal naranjista, dijo que el 50 por ciento de las candidaturas serán para externos, lo que abre las puertas de par en par a Maki la magnánima, la que además y lo que sea de cada quien, la convertiría en una rival con reales posibilidades de derrotar al candidato morenista. Eso de las lealtades, ni pregunten. En pocas palabras, debe derogarse la reelección en los cargos alcaldicios, no solamente ha sido nefasto en Reynosa y salvo en dos que tres municipios que han sido botones de muestra en la generalidad de los casos, esa reelección ha sido perjudicial y nuestra maltratada Reynosa es un vivo ejemplo.
Por otro lado, en Ciudad Victoria proyectan entregarle a una empresa el cobro del impuesto predial. La intención se ve positiva, pero me parece que, si la lleva a cabo EDUARDO GATTÁS, el alcalde de aquel municipio, se va a auto clavar otro clavo en su ataúd político. Con la pura escasez de agua, que por cierto no es su culpa, tiene para que le estén recordando a su mamacita, un día sí y el otro también, y ahora enviar a cobradores particulares al estilo Coppel, va a poner las cosas al rojo vivo entre la ciudadanía por la otrora ciudad amable. Me parece que le va a tener que pensar más antes de aterrizar tal intención. Y terminó el periodo vacacional de la Semana Mayor, desafortunadamente con saldo rojo en las carreteras de la entidad, pero sobre todo en la que viene de San Fernando a Reynosa, donde se registró un accidente con pérdida de vidas, integrantes de una sola familia, en donde una pipa embistió un automóvil y sobrevino la desgracia, lo cual obliga a la policía estatal a que verifique el estado de salud en que se encuentran los choferes del transporte público y privado cuando van a iniciar sus labores.
Algunos se quedan dormidos sobre el volante, otros conducen irresponsablemente, ya bien a exceso de velocidad o porque se les pasaron las cucharadas. Los hechos no deben repetirse, mientras que la FGR pide enjuiciar a los elementos del Ejército mexicano que causaron la muerte de cuatro ciudadanos en fecha reciente en Nuevo Laredo. Los hechos no se dieron concretamente por la paz y hay informaciones que había escándalo y abuso por parte de los civiles, el problema es que los soldados, ya se ha visto, no están preparados para afrontar contingencias provocadas por gente que se pone al brinco, como tampoco lo están las policías, así que la ciudadanía de bien, a ver quién se preocupa por ellos.
Por los revoltosos y hasta delincuentes sobran los defensores de los derechos humanos que claman justicia, que mientras les sigan haciendo caso llegará el momento en que no habrá corporación que acuda al llamado de los ciudadanos de bien, que son los que pagan los platos rotos.
Y por hoy, BASTA.
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